25/11/07

El carnaval de la tecnociencia



Antonio Lafuente.
El carnaval de la tecnociencia.
Gadir. Madrid, 2007.


Como el diario de una navegación entre las nuevas tecnologías y los nuevos patrimonios ha definido en el subtítulo Antonio Lafuente, Doctor en Físicas e Investigador del CSIC, El carnaval de la tecnociencia, un libro que reúne una selección de los mejores post publicados en su blog Tecnocidanos.

Con propósito divulgativo, sin banalizaciones y con rigor en sus análisis, este es un libro dirigido a cualquier ciudadano de a pie, a los muchos tecnocidanos que han frecuentado su blog y a aquellos otros que, interesados en cuestiones de ciencia, tecnología y sociedad, lo conozcan ahora en este libro editado por Gadir.

La proximidad al lector en el tratamiento de temas científicos y en sus repercusiones en la sociedad hará fácil el acceso a un volumen que admite dos lecturas: la convencional, para lo que el libro se ha articulado en tres partes con breves capítulos (los post), y la consulta como un prontuario de actualidad científica, para lo que se ha elaborado un útil índice analítico de conceptos y temas.

Nuevos actores, nuevos procesos y nuevas prácticas se abordan en torno a tres ejes: las nuevas tecnologías, los nuevos patrimonios y las nuevas formas de ciudadanía con un sesgo divulgativo que los hace asequibles a un público amplio.

Porque este libro no sólo trata de la actualidad científica y su repercusión en la sociedad, sino que contiene una propuesta nueva: el derecho y la necesidad de participación del ciudadano en la ciencia, para “sacudirse el estigma de la modernidad que les condenó a ser el otro de la ciencia: la representación pública de los que no saben.”

El carnaval de la tecnociencia organiza sus argumentos en tres etapas:

1.-La participación ciudadana en la ciencia con la puesta en valor del conocimiento amateur y profano.
2.- Una segunda etapa sobre la importancia del experto en la gestión del mundo actual y las presiones que debe soportar.
3.- Por último, la tecnociencia y su capacidad para alterar el entorno compartido y las bases de nuestra vida en común.

Antonio Lafuente ha escrito un libro de crítica de la ciencia, con el convencimiento de que la ciencia no es un asunto exclusivo de científicos y para científicos. Lo que plantea el libro es un acercamiento de la ciencia al ciudadano común con un léxico comprensible, una invitación a la participación para evitar la privatización del conocimiento.

Quizá no se hubiera podido elegir un momento más oportuno, pues probablemente estemos ante la oportunidad de una nueva Ilustración a través de la revolución del conocimiento de Internet, la Wikipedia o los blogs. Y posiblemente las nuevas formas de transmisión del conocimiento tengan como primer y más decisivo efecto lo que el autor llama con brillantez y acierto la democratización de la mirada sobre el mundo, un conocimiento ni minoritario ni jerarquizado y una opinión no corporativa.

El libro es también, como indica su título, la crónica de un carnaval y un espectáculo en el que sin embargo – y voces como las de Lafuente lo demuestran de forma palmaria- no todo el mundo quiere hacer del conocimiento científico un negocio, un reducto de poder o un lugar reservado a una selecta minoría de tecnócratas que cultivan la oscuridad y el secreto.

Sus artículos cortos, directos y jugosos abordan todo un universo de cuestiones que suscita la reflexión sobre ciencia, tecnología, conocimiento y sociedad: la revolución de la escritura y las bibliotecas digitales, el altruismo y los números primos, la web y las radiaciones electromagnéticas, la genética recreativa o el Sida.

Temas muy variados, como se ve, pero con un factor común: su interés en la repercusión social de la ciencia y en su dignificación a través de las nuevas formas de acceso al conocimiento.

Luis E. Aldave