11/9/09

Antología poética andaluza



Entre el XX y el XXI.
Antología poética andaluza (II)

Edición de Francisco Morales Lomas.
Carena. Barcelona, 2009.


Como una antología integradora, ajena a capillas literarias y a conflictos literarios pasajeros defiende Francisco Morales Lomas la selección de poetas andaluces actuales cuya segunda entrega acaba de publicar Ediciones Carena.

Se reúnen aquí, como en el primer volumen, que apareció en 2007, muestras de diez poetas que representan la diversidad de voces y tendencias del panorama poético andaluz en la transición del siglo XX al XXI: Luis García Montero, Antonio Enrique, Aurora Luque, Domingo F. Faílde, Antonio Jiménez Millán, Rosa Romojaro, Alberto Torés, Álvaro García, José Sarria y Fernando de Villena.

Diversidad tan natural como la heterogénea calidad de los textos aquí reunidos, porque -como puede suponer el lector- cuando se selecciona a veinte poetas lo inevitable es que esas diferencias emerjan para hacerla discutible. ¿Y qué sería una antología si no generara polémica, si no contuviera nombres difícilmente justificables?

Cada uno de los poetas ha preparado una Poética que resume sus ideas o sus propósitos estéticos. Y también en ese plano, como era de esperar, los textos evidencian la distancia entre la ambición y la vacuidad, entre la autocrítica y la conciencia creativa.

En cualquier caso, y pese a la profusión de nombres que tiene el peligro de ser menos una selección que un censo, Morales Lomas propone un panorama creíble de la poesía que se escribe en Andalucía en la actualidad.

Como en toda antología, la relación de nombres se mueve entre lo obvio y lo discutible sin escalas intermedias con una ordenación ininteligible que subraya involuntariamente la muy distinta calidad de la obra y los poemas.

Y es que, se quiera o no, una antología contiene un canon más que la sugerencia de un panorama y aunque el propósito no vaya más allá de una instantánea del paisaje, no dejarán de ser discutibles el enfoque o el ángulo elegidos.

Ya saben el lector y el antólogo que ese panorama se podía haber fotografiado desde otros puentes y otras perspectivas no menos creíbles.

Santos Domínguez